Y final.

Pues finalmente se acabo mi año de intercambio.
Parece que fue ayer cuando me comunicaron que finalmente habian aceptado mi solicitud de abrir una nueva via de Erasmus en Noruega! la verdad es que el tiempo pasa volando, y eso solo pasa cuando lo estas pasando bien y estas disfrutando, cosa que seguro que he hecho.
Escribo estas lineas desde Barcelona ya, mis ultimos dias en Noruega fueron un poco ajetreados, entre un viaje largo que hice hacia el sur, despedidas, limpiar la habitacion y hacer maletas.

Despues de unos dias de trabajo bastante intensos, me despedi del trabajo y organizamos un viajecito hacia el sur de Noruega, donde aun no habia estado. Los integrantes eramos Bosco, Carmen, Mauro y yo, y en Bergen Gitte se nos uniria, y nos encontrariamos tambien con Yasmina, que andaba por la zona.

Salimos de Trondheim en direccion a Bergen, cogiendo la famosa Sognefjellsvegen, con unos paisajes de glaciares y montañas espectaculares.



Pasamos tambien por una de las lenguas del glaciar Jostedalsbreen, asi que nos acercamos, ya que el camino es corto. La verdad es que impresiona toda esa masa de hielo enorme, que anteriormente dio forma al valle por el cual hemos venido, y que ahora retrocede.





Previo paso por la iglesia mas antigua de toda Noruega, en Borgund, y parada en Voss para ver la final del mundial de futbol, llegamos a Bergen de noche ya, me asombra como alli es mucho mas de noche que en Trondheim, se nota que esta mas al sur. Dormimos, y al dia siguiente de turisteo por la ciudad. La verdad es que me agobio un poco, estoy muy bien acostumbrado a la tranquilidad de Trondheim y cuando me meto en el fish market y empiezo a escuchar mas español que noruego, y turistas arriba y abajo, no me hace sentir muy bien. Damos una vuelta por el centro, nos encontramos con Yasmina, y nos subimos a uno de los picos de la zona. Bergen esta rodeada por 7 picos, y hay una caminata que se llama los 7 picos, pero son como 35km, y no tenemos tiempo suficiente.
En Bergen llueve casi cada dia, creo que de media unos 300dias al año, aunque ya ha llovido un poco por la mañana y el dia aguanta bastante. Despues de un paseito por el bosque, estas son las vistas.



Gitte se nos une, y decidimos quedarnos a dormir ahi y salir por la mañana, prometiendonos que sera temprano, y realmente se cumple.
Salimos direccion a Stavanger, para ir hacia el Preikestolen y finalmente, por movidas con ferris y carreteras que parecian mas cortas, llegamos a las 19:30 alli. El dia esta totalmente despejado, y si teniamos dudas si subir o no, se disipan rapidamente. Empezamos a caminar a las 20h, y se agradece porque apenas no nos cruzamos con nadie, siendo este uno de los sitios mas turisticos de Noruega, y en verano, y un dia soleado.

Es un camino facil, solo con una parte un poco mas inclinada, y nos lleva 1:25minutos en hacerlo, y entonces empieza el espectaculo... las fotos hablan por si solas.





El sitio quita el aliento, con un acantilado de 604m sobre Lysfjorden, totalmente espectacular. Y el hecho de que apenas hubieran 4 personas mas, y se estuviera nublando, nos dieron unos colores por las nubes y el cielo perfectos.

Despues de mil fotos, videos, y teorias acerca de si te caes te mueres antes de llegar al suelo por parada cardiaca, volvimos hacia el coche, ya oscureciendo.
Conducimos un poco, acampampos, y nos levantamos con un solazo espectacular. Pusimos rumbo al otro extremo de Lysfjorden, para hacer otra excursion de las famosas, de las que hay que hacer, Kjeragbolten.

Despues de perdernos un poco, y con una carreterita que tela, llegamos ahi pasado mediodia, y nos ponemos en marcha, esta vez acompañados de mas gente y sin camiseta.
El sol calienta muchisimo, y el camino es mas duro que el anterior, habiendo que ayudarse de cadenas instaladas en la roca para no patinar y caer durante metros y metros.
Despues de un par de horitas caminando, descubrimos el sitio. Esta vez hay mas gente, pero eso no le quita belleza al lugar.



Despues de las fotos de rigor, y disfrutar del paisaje y del buen tiempo, nos volvemos para abajo, ya bastante insolados ya que el sol no se ha escondido en ningun momento.
Hemos quedado con Mauro en Odda, ya que el no se ha apuntado a bajar hasta Stavanger porque ya habia estado, asi que cogio su bici y se fue de Bergen a Odda. Asi que cogemos el coche y empezamos a ir hacia Odda, yendo por el interior esta vez, y cambiando el paisaje de fiordos a profundos valles inhospitos y montañas redondeadas por la accion de la erosion durante millones de años.

La intencion era hacer otra caminata el dia siguiente, pero el vendaval que casi destruye la tienda, y a los que dormian dentro, y la constante tormenta nos hace desistir. Nos dicen que siguiendo el fiordo el tiempo mejora, asi que eso hacemos, y ponemos rumbo al norte ya los 5 en el coche.

Efectivamente, el tiempo ha mejorado, incluso sale el sol, y decidimos hacer una pequeña caminata en una zona de cascadas, y aunque el tiempo empieza a empeorar, seguimos hasta el pie de cascada de Vøringsfossen, que luego nos dimos cuenta de que era una de las mas visitadas de toda Noruega.

Seguimos en nuestro camino a traves de Hardanger, por el altiplano de Hardangervidda, un sitio espectacular, lleno de lagos preciosos y que cautiva nuestra atencion.
Hemos decidido ir a dormir a Lillehammer, asi que atravesamos todo el interior de Noruega, que en esta epoca del año no puede estar mas verde.
Llegamos a Lillehammer, ciudad olimpica de los JJOO de invierno del 1994, y subimos a la zona de saltos de ski, con vistas sobre la ciudad.
Me sorprende que Lillehammer fuera ciudad olimpica... cuenta con 20.000habitantes, y la verdad es que no tiene mucha vida... me extraña mucho.
Despues de cenar bajamos al centro y encontramos al menos un sitio para hacer una cerveza para celebrar el final del viaje, ya que a la mañana siguiente cogeriamos el coche en direccion a Trondheim.

Y asi acabo mi ultimo viaje de esta epoca en Noruega.

Los pocos dias que me quedaron en Trondheim fueron de despedidas, limpieza y descansar un poco, hasta que el jueves por la noche cogi el autobus en direccion a Oslo bien cargado de maletas.

todas las fotos en mi picasa

Y hasta aqui llego mi año en Noruega.
Ha sido un año muy intenso para mi, he viajado bastante, he conocido a muchisima gente de diferentes paises, cosa que te hace ver las cosas desde otro punto de vista, he conocido la cultura del pais y su idioma, y lo mas importante es que me ha enseñado muchas cosas y he aprendido muchisimo. Realmente es una experiencia que recomiendo a todos, porque es una experiencia inolvidable.

Y asi pongo punto final tambien a este blog, que espero que hayais disfrutado leyendolo tanto como yo escribiendolo, que os haya ayudado y que os haya motivado al menos un poco para seguir viajando y conociendo mundo, y aprendiendo cosas nuevas, que de eso se trata esta vida.
Mis aventuras seguiran, pero en otro blog!

levva livet! :-)

Oslo, sunny Oslo

Siguen las aventuras por Noruega, y mi teclado sigue sin reconocer los acentos.

Como muchos sabeis, consegui un trabajo de verano como guia turistico, muy bien pagado pero el problema es que se trabajan pocos dias. Aun asi, me permite tener mucho tiempo libre y ganarme algo de dinero para costearme viajecitos y demas.

Los dias van pasando en Trondheim entre despedidas, gente que quizas no volveras a ver, gente que sabes que volveras a ver pronto pero aun asi es triste despedirse cuando has pasado tanto tiempo juntos el ultimo año... la verdad es que ya quedamos 4 gatos en la ciudad, cosa que hace unirnos mas, y aunque la ciudad esta un poco desierta, pero aun encontramos cosas para hacer y pasarlo bien.

Aprovechando un viaje relapamgo a Munich, tuve oportunidad de pasar un dia en Oslo, la capital del pais, ciudad que aun me faltaba por visitar. No soy mucho de turismo de ciudad, pero supongo que Oslo se merecia al menos un dia de visita, es como una obligacion visitar la capital del pais donde has estado viviendo un año.
Dicho y hecho, cuadre horarios y cogi el bus a las 23h en Trondheim para plantarme a las 7 de la mañana en Oslo, sin haber podido dormir apenas nada, y con un cielo totalmente azul y previsiones de "calor", es decir, alrededor de los 20grados.

Llego y estoy como aturdido, me siento, pienso que hacer, dejo el material mas pesado en una taquilla, musica en el mp3 para activarme y salgo a ver la ciudad.
No tengo un plan exacto, voy a mi aire, asi que primero cojo un mapa en la oficina de turismo y me situo en una ciudad donde nunca he estado. Es domingo a las 8 de la mañana, asi que la ciudad esta bastante muerta, pero el sol invita a pasear.

Empiezo por Karl Johans gate, una de las calles peatonales mas centricas de Oslo, hasta llegar a la catedral de Oslo, bastante poca cosa comparada con la catedral de Trondheim, todo hay que decirlo.



Me sigo paseando y decido seguir una recomendacion y ir a la Opera, un edifico bastante nuevo que esta en la costa. El edifico en si es bonito, con buenas vistas y ademas el dia es espectacular asi que aprovecho para sentarme al sol y desayunar algo.



Me quedo un buen rato ahi, viajo solo, asi que me lo tomo con calma ya que tengo todo el dia por delante.
Mapa en mano, decido cual sera el recorrido que hare durante la mañana, asi me que dirijo a la fortaleza de Akershus, y despues de ver a un guardia real haciendo su tradicional turno, me subo a la zona mas alta a ver las vistas del fiordo y la ciudad.
A mano izquierda me queda el fiordo con sus islas y la zona de museos, en el centro queda Aker Brygge, que viene a ser como el Solsiden de Trondheim, la antigua zona de astilleros, ahora recuperada y llena de bares no muy baratos que digamos con los yates aparcados en la puerta. A mano derecha queda la ciudad, y al fondo en la montaña, Holmenkollen, area recreativa de Oslo donde se celebraron los campeonatos del mundo de fondo el año que viene.



Despues de una pequeña siesta disfrutando del sol, me dirijo a Aker Brygge, pasando por el ayuntamiento, justo enfrente del fiordo, donde hay colas larguisimas para coger alguno de los ferrys que navegan por el fiordo de Oslo. La ciudad ya ha despertado. Escucho mas español que noruego, todo hay que decirlo.

Despues de un pequeño paseo por la zona super-pija de Oslo, continuo con destino a Bygdøy, la peninsula que queda a unos 5km del centro, con todo de zonas verdes y varios museos interesantes. Decido ir caminando disfrutando del buen tiempo y de las vistas, no tengo ninguna prisa.



Llego un poco cansado y sudando bastante, quien decia que en Noruega no hace calor? debemos rondar los 22grados, sol, asi que hay gente por todas partes.
Me acerco a la zona de museos, pero los precios hacen que me replantee el entrar... mi maltrecha economia estudiantil no acepta extras, asi que como no soy una persona de museos, me basta con una breve visita al Museo de los barcos vikingos, donde puedo ver uno desde la entrada, cosa que ya me basta.

Descanso en la entrada, y sigo escuchando mas español y italiano que otro idioma. Sigo paseando en direccion al punto donde puedes coger el ferry de vuelta, no me apetece volver caminando y asi disfruto un poco de las vistas del fiordo.
Por el modico precio de 40nok el barquito te devuelve al lado de Aker Brygge, aprovecha para relajarme y disfrutar del aire fresco y de las vistas.



Despues del paseito hasta la zona de museos, sigo vagando por el centro, hasta que llego al parque del palacio real donde como algo y me pego otra siestecita. Esto de viajar solo y sin stress es lo mejor!

Ya por la tarde decido acercarme hasta un parque un poco alejado del centro, Vigelandsparken, que tambien me habian recomendado visitar. Asi que despues de una caminata un poco larga, lo encuentro y con el infinidad de gente, tanto turistas como ciudadanos, disfrutando de este dia soleada y caluroso en el norte de Europa. El parque esta lleno de esculturas, culminado con un monolito de granito hecho de cuerpos humanos
entrelazados.



Estoy bastante tiempo disfrutando del sol, las esculturas y la tranquilidad del sitio, pero la infinidad de turistas hace que me agobie un poco, y no voy muy sobrado de tiempo, ya que tengo que volver a la estacion central a coger el bus para el aeropuerto. Asi que dejo atras el peculiar parque de las esculturas con rumbo a la estacion, atravesando todo el centro, y llegando con solo 10minutos de sobra para coger el autobus que me llevaria al aeropuerto de Rygge, donde la mañana siguiente cogeria un avion con destino a Munich, pero eso ya es otra historia.


las fotos en mi picasa

Paron.Despedidas.Reflexiones

Primero de todo, perdonad que escriba esta entrada sin acentos, no se que le pasa a mi teclado que no los reconoce.

Y en segundo lugar, perdon por no haber actualizado desde semana santa, pero diversos acontecimientos me han hecho no tener demasiado tiempo: viajes varios, visita de mi familia, examenes, despedidas de gente, trabajo...

Asi que voy a resumir lo que ha dado de si todo este tiempo despues de Semana Santa.

Desde el 18 de abril al 9 de mayo estuve yendo de viaje a hacer snowboard de montaña a diferentes valles y montañas, pero todos en la misma area, Trollheimen.
Hubieron todo tipo de nieves, desde powder hasta nieve dura y hielo, y lo mismo con el tiempo, desde solazo espectacular hasta niebla y tormenta que no te deja ver nada, muchas veces incluso en el mismo dia...


Aun asi, fueron unos viajes impresionantes con el grupo compuesto por Andi, Yasmina, Lorenz, Heather y Florian, donde he aprendido muchisimo, me he divertido mas todavia y me ha permitido ver paisajes espectaculares de Noruega y disfrutar de sus montañas en todo su esplendor.
Especialmente Kirketaket, donde esta vez si que pudimos hacer cima, con un cielo totalmente azul en la subida, y aunque luego se nublara, con unas vistas que te dejan sin respiracion... sin duda la mejor montaña que he hecho con snowboard.

Kirketaket, con Andi, Yasmina y Lorenz.



Okla, con Andi, Heather y Florian





Cuando el calor aprieta en la montaña... moda primavera-verano 2010 fjellfasjon




Echando la vista atras echo en falta esos momentos...

Despues de esto, y dando por cerrada la temporada el 9 de mayo, mismo dia exactamente que el año anterior, tuve la visita por un fin de semana de mi familia, al completo, desde Hamburgo y Barcelona. Dias relajados enseñandoles la ciudad y caminando bastante... siempre se agradece ver a la familia cada cierto tiempo cuando estas fuera de casa!

Un dia despues de que mi familia se fuera, fue el famoso 17 de mayo, dia nacional de Noruega.
Para celebrarlo se hace un desfilo en el centro de la ciudad con diferentes escuelas, asociaciones y demas desfilando. Todos van vestidos con sus trajes tradicionales y infinidad de banderas noruegas. Muy patriotico todo junto, y la verdad bonito de ver tanta gente orgullosa de su pais.



Despues del dia nacional toco ponerse a estudiar un poco en serio, con un mini-viaje a una cabaña, Heinfjordstua, en bici con Florian. Era mi primer viaje despues del largo invierno, y la verdad es que ir en bici o caminar por el bosque todo lleno de vida y volver a ver el color verde otra vez se agradece. Ademas te permite salir en kayak por el lago que 6 semanas antes estaba totalmente helado...

Y asi segui, entre estudios y fiestas de despedida. La verdad es que los lazos que se han formado con gente que apenas conoces de hace un año son muy fuertes, el hecho de estar todos en un pais nuevo y que al fin y al cabo hemos venido solos aqui nos hace abrirnos mas para conocer a gente nueva y dejarse conocer.
Lo mejor es quedarse con los buenos momentos, las amistades, y estar contentos por haber tomado la decision de venir aqui y que, al menos a mi, me ha hecho crecer como persona por encima de todo.

Påske Tur

Después de una semana en Cornualles, Reino Unido, de salida de campo con la universidad dónde todo parecía tan barato comparado con Noruega, pero el tiempo seguía igual de lluvioso o más, llegó Semana Santa.

Confirmada la visita de una amiga desde Barcelona el día 1, montamos un pequeño tour por Noruega, dónde intentaríamos ver el máximo de sitios, sin demasiados planes establecidos, ya que en Noruega el tiempo es una variable a considerar muy especialmente.

Así que todo empezó el miércoles 31, alquilamos el coche, y pusimos rumbo a coger el ferry que nos llevaría al otro lado del fiordo, Fosen. Desde mi habitación siempre veo el fiordo y el otro lado, así que me apetecía ver que había ahí!
El tiempo no era muy alentador, pero que le vamos a hacer



Desembarcamos en Fosen, el otro lado, finalmente. Cogemos una carretera que sigue toda la costa, no tenemos ninguna prisa, sólo queremos ir conduciendo disfrutando de los paisajes, parando donde nos apetezca.
Paramos para subir una pequeña montañita, aunque el viento es muy fuerte. Desde allí tenemos vistas del final de Trondheimsfjord, y vemos su principio, su punto de unión con el oceáno. Las montañas parecen más altas y escarpadas a este lado, pero la nieve escasea, mucho más que en Trondheim.
Seguimos conduciendo, dejando esta vez la costa, y adentrándonos en tierra firme, y vemos que es un paisaje totalmente diferente, lagos helados, montañas repletas de nieve... cuesta creer que estamos a sólo unos kilometros del océano!
Llevamos rumbo a Åfjord, y se está haciendo tarde, así que empezamos a buscar un sitio para acampar, pero la lluvia intensa y el viento nos hace descartar la idea, tenemos por delante un viaje largo y no es plan de acabar todos totalmente empapados el primer día.
Después de mucha búsqueda y llamadas telefónicas, nos quedamos en una cabaña al lado del río, con vistas al fiordo, muy acogedora, no está nada mal!



Después de pasar la noche hablando, cartas, cervecitas y demás, nos levantamos con algo de sol... aunque es un espejismo, rápidamente vuelven las nubes y la lluvia, aunque esta vez muy suave.
Ponemos rumbo hacia donde podamos ver el océano abierto, tanto ver fiordo cada día, tenemos ganas de ver el océano...

El día es gris, típico noruego, pero el agua es cristalina, y a veces deja ver colores verdes que podrian ser de cualquier playa paradisíaca, sólo le falta el sol... y algunos grados de temperatura más.



Comemos algo, la lluvia nos hace acabar antes de hora, y seguimos nuestro viaje. No podemos hacer mucho más, aunque da tiempo para hacer unos chutes en un campo de futbol, y columpiarnos un poco en unos columpios... seguimos siendo unos niños!
Ponemos rumbo al aeropuerto de Trondheim para recoger a mi amiga, llegamos un poco tarde, la recogemos y para casa a dormir, al día siguiente saldriamos bien temprano.
La noche se hace larga en casa, hablando y poniéndonos al día, pero un sol espectacular nos despierta la mañana siguiente, parece que nos han traido el buen tiempo desde Barcelona!

Cargamos el coche y ponemos rumbo por la E39 hasta Kristiansund. De camino, una pequeña parada para desayunar en Vinjefjorden.



Seguimos nuestro camino, repleto de paisajes espectaculares, montañas que hacen volar mi imaginación y ferrys que nos vacían los bolsillos, hasta que llegamos a Kristiansund.



Pequeño paseo por la ciudad, y seguimos rumbo sur... otro tunel, de pago por supuesto, y nos plantamos en la famosa Atlanterhavsvegen donde paramos a comer algo que se ha hecho tarde. La carretera en si son 8kkm, sólo 3 puentes y un par de curvas... me vienen sentimientos de indiferencia, no sé porqué es tan famosa si sólo son 3 puentes, es decir, lo que se admira aquí es la obra del hombre, y no la naturaleza en si. El sitio no se puede negar que es precioso, pero sitios cómo este hay inifinitos en Noruega, y sin tanto turista.
El día sigue gris y decidimos llamar a Yasmina, que está haciendo una ruta en bici, y nos invita a la cabaña donde están descansando, sólo unos kilómetros atrás.
Llegamos allí y cogemos un par de botes de remos y salir a remar un poco.
Da gusto remar en estos paisajes!
Volvemos a casa después de más de una hora de remar, y nos comentan un sitio para ver la puesta de sol... soy un poco escéptico, está todo muy nublado, pero vamos igualmente.
Y de repente, como por arte de magia, las nubes desaparecen y nos regalan una espectacular puesta de sol, que nos deja a todos impresionados.





Después de la puesta de sol, para nuestra cabaña a preparar algo de cena y descansar.
Al día siguiente, suena temprano el despertador, nos esperan muchos kilometros por delante!
Cogemos esta vez la Carretera del Atlántico, esta vez con sol y cielo azul, y llegamos hasta Molde, famosa ciudad noruega.
De aquí otro ferry, disfrutando del solecito en cubierta y de los espectaculares paisajes repletos de contrastes, afiladas montañas cubiertas de nieves mezclándose con fiordos y el mar.

A mediodía nos plantamos en Ålesund, donde fuimos directos al mirador para comer algo y disfrutar de las vistas, no tanto del buen tiempo ya que se había tapado un poco el día.



Muchas fotos, algo de comida, una pequeña vuelta en coche por la ciudad, y seguimos, tenemos un poco de prisa, ya que nos queda bastante trayecto por delante. Y además, tampoco nos apasiona especialmente perder mucho tiempo visitando ciudades...

Ponemus rumbo a Stranda, y el paisaje ha cambiado, me recuerda mucho a cuando fuí a Suiza la primavera pasada... montañas blancas altas y escarpadas, valles verdes rellenos de vida... nos cruzamos con toda la gente que acaba su día de ski en la estación de ski de Strandafjellet pero seguimos dirección sur, hacia Hellesylt. Desde aquí es desde donde se sale para el famoso Geirangerfjorden, quizás el fiordo más famoso de Noruega. Justo salir de un túnel dirección Hellesylt tenemos que parar porque antes nosotros aparece el fiordo, totalmente espectacular.



Infinidad de fotos, de todos los ángulos y posiciones diferentes, con ardilla incluida, y con el hecho curioso de coincidir que Narcís estaba con sus amigos en una barca en ese mismo momento en el fiordo. Bajamos hasta Hellesylt con la promesa de volver en verano para hacerlo íntegramente remando, y ahí nos encontramos con Narcís y su gente, que hacen el viaje en sentido inverso.

Un poco de charloteo, y rápidamente dirección a Stryn, dónde hay una estación de ski que abre en verano y espero visitar. Los paisajes son totalmente alpinos ahora, estamos llegando a la zona donde están las montañas más altas de toda Escandinavia, y eso se nota.
Subimos un puerto de montaña muy interesante y al salir del túnel a continuación parece que nos hemos transportado otra vez al puro invierno! Nieva ligeramente y todo está repleto de nieve, el termómetro vuelve a marcar grados negativos.
En poco tiempo, ya de noche, llegamos a Skjåk, donde el ex-compañero de piso de Michal nos había ofrecido su casa para dormir, y por supuesto aceptamos.

Una noche larga, más de lo que queríamos, pero muy animada dio paso a un pequeño madrugón con un desayuno enorme. Ponemos rumbo a Lom, y de ahí nos adentramos, por fín, en Jotunheimen

Después de pensar un poco, decidimos subir por una carretera con el objetivo de caminar un poco. El paisaje es espectacular, el invierno nunca se ha ido de aquí, así que cada uno se calza el equipo que tiene, y para arriba a aprovechar el solazo que tenemos.
Salimos desde Rausbergstulen a unos 1000 metros, siguiendo las marcas que llevan a Juvasshytta, una cabaña cerrada en esta temporada. El paisaje es impresionante, y el sol calienta muchísimo... hasta que salimos de la cara de la montaña donde estábamos, a sotavento, y el viento empieza a hacer de las suyas. Cuando llevas una tabla a la espalda no es que sea muy agradable que el viento te empuje hacia atrás, pero el lugar se merece que haga un esfuerzo para seguir caminando.



Llegamos a la cima que habíamos visto desde abajo, y a la que sinceramente no pensaba que íbamos a llegar. Mención especial a Michal que sube con skis de fondo, que subir no se sube mal, pero le queda la bajada ahora...

Fotos de rigor, admiramos el paisaje durante un rato, pero el viendo pega bastante fuerte aquí arriba. Se distingue un poco lejos el centro de ski de verano de Galdhøpiggen, el pico más alto de toda Noruega y por extensión de toda Escandinavia.
Nos ponemos en marcha, raquetas y bastones a la espalda, y snowboard a los pies, finalmente. Michal, con skis de fondo, empieza a bajar intentando no matarse, y Queralt con raquetas va tirando. Heather, con sus skis de telemark y yo empezamos nuestro descenso.... primero nieve venteada y dura, sumándole que estás frío cuesta enlazar los primeros giros, pero el tercer giro ya sale suave, la nieve está mejor, y empiezo a bajar ya con velocidad, disfrutando cada segundo encima de la tabla.

Voy esperando a Heather y a Michal, y en parte a Queralt, aunque su ritmo es mucho más lento. La nieve está muy bien, polvo con algunas roquitas pequeñas para ir saltando... me giro para ver mi huella y el pico en el que hace nada estábamos arriba.



Me espero un rato hasta que llegan Heather y Michal, a Queralt la tengo controlada que no se pierda, y sigo bajando. La última parte tiene un poco más de pendiente, con algun árbol, y más nieve, cosa que pone el broche de oro al descenso.

En la foto Michal celebrando que ha sobrevivido al descenso con skis de fondo, que no es fácil, con el pico de fondo, de unos 1500m de altura.



Vuelta al coche, bajada, y cogemos Visdalen hasta Spiterstulen, punto de partida de la mayoría de excursiones en Jotunheimen.
Buscamos el alojamiento más barato, que son 800NOK (100€ aprox.) por una habitación de 4, más bien zulo, con acceso a duchas y baños. Considerando que esto es Noruega y en medio de las montañas más altas de Escandinavia, pues no lo vemos excesivamente caro.

El sitio está emplazado en un lugar mágico, un valle con escarpadas montañas a lado y lado, y en esta época del año ves a multitud de esquiadores de montaña, alpinistas y telemarkers que vuelven de sus excursiones para descansar.



Nieva ligeramente y nos ponemos a cocinar algo de pasta. Nos informan que hay un meeting con un guía a las 21h, así que decidimos ir a ver qué ruta nos aconseja, no tenemos mucho tiempo ya que al día siguiente hay que volver a Trondheim a una hora razonable para devolver el coche.
Después de comer el que probablemente haya sido el peor plato de pasta de mi vida, vamos al encuentro con el guía, y nos comenta que el riesgo de avalanchas es bastante alto por la subida de temperaturas primaverales. Debido al poco tiempo que tenemos, nos recomiendo un paseo hasta los pies de un glaciar, dónde además hay un descenso fácil y suave. Le hacemos caso, no tenemos ni idea de la zona, y preferimos seguir el consejo de un experto en el tema.
Así que a dormir y mañana será otro día.

Nos levantamos y el cielo azul ha vuelto a Noruega, cosa que nos alegra muchísimo.
Nos damos cuenta de la magnitud del sitio donde estamos en cuanto nos ponemos a caminar.





El sol calienta una barbaridad, da la sensación de estar en la playa tomando el sol. Seguimos subiendo, ahora por una arista con algún paso delicado, pero nada en especial.
La parte frontal del glacier empieza a asomar, es espectacular el color azul que tiene, en las fotos no se aprecia tan claro como realmente es.



Heather y yo caminamos hasta un poco más arriba para disfrutar más del descenso. El viento aprieta, pero el sol también, sólo algunas nubes pasajeras lo tapan ligeramente.
Llegados al punto designado, nos ponemos nuestras tablas en los pies, y empezamos el descenso que nos devolverá hasta Spiterstulen otra vez, con unos 15minutos de caminata en plano.
Recoger todo y dejar el sitio con pena de no poder estar más días, pero con muchas ganas de volver.

La vuelta a Trondheim se hace bastante corta, con el sol acompañándonos en todo momento...
y cuando parecía que el viaje iba a acabar, faltaba la guinda al pastel.
Nos comentan que hay aviso de auroras boreales, pero yo soy un poco escéptico al respecto, estamos teóricamente fuera de temporada y los demás avisos durante el invierno se terminaron convirtiendo en nada, así que no le damos demasiada importancia. Pero, de repente, me llama Queralt que salga fuera a mirar rápido... y ahí está, por primera vez en mi vida, una aurora boreal!!
no podía haber un final mejor... rápidamente cogemos abrigos y nos subimos a unos prados encima de mi casa, dónde hay menos luz, a ver si podemos verla mejor... y éste fue el resultado :-D






ahora sí... se acabó nuestro viaje de Semana Santa.

las fotos en mi picasa

Åndalsnes

Después de lo que se preveía que seria una semana de intensas nevadas, acabó siendo más soleada que otra cosa, aunque se agradece y mucho, con algún dia de powder en Vassfjellet... el plan de ir a Oppdal a pasar el finde se desvaneció, pero rápidamente se montó un plan de ir a pasar el finde a hacer un poco de freeride.

Nos juntamos 4, Yasmina, Sylvain, telemarker francés con el que he hecho alguna viajes, y Lorenz, chico que conocí dos días antes, de las Dolomitas, Italia.
Planificamos un poco el viaje, bastante condicionados por el tiempo, pero anotamos varios picos que parecían interesantes, copiamos algunos mapas, y quedamos en salir el sábado por la mañana.

La noche del viernes se alargó demasiado para mi, así que después de haber dormido poco más de un par de horas, ya estaba en pie esperándoles, con todo el material listo.
Salimos un poco más tarde de lo previsto, y tal cómo entre en el coche, me quedé dormido...
Me desperté y esto es lo primero que vi...



Hice algunas fotos desde el coche, la verdad es que la visión de estas montañas nevadas es espectacular! Este valle nos conduciría a Åndalsnes

Decidimos intentar un pico que habíamos fichado ya, Kirketaket, de 1439m, donde parece que es un sitio bastante típico, con la traza ya hecha... tenía buena pinta, aunque yo pensara que era quizás demasiado para Yasmina, novata en esto de patear y que lleva pocos días encima de sus skis de Telemark, ya que el desnivel es considerable (empezamos desde nivel de mar). El horario también era justo, pero cuando fuimos en dirección a Isfjorden y vimos el pico allí al fondo, no pudimos resistir las ganas.

El pico es el segundo empezando por la derecha, que se accede careneando, y luego encarando la pala final.



Así que llegamos hasta el parking, preparamos las cosas, comimos algo, y nos pusimos en marcha... bastante tarde, la 12 y poco más... y el tiempo se ha tapado, ya no tenemos el solazo que había por desgracia.
El camino empieza en una pista de ski de fondo, pero rápidamente la dejamos a un lado para empezar a ganar desnivel dentro de un bosque. La traza está hecha y avanzo rápido, dejándoles atrás, parece que Yasmina no se siente muy cómoda foqueando...
Me quito el polar, no hace nada de frío y el caminar con la tabla a la espalda hace que te sobre toda la ropa..
No puedo parar de mirar atrás, la vista es espectacular.

Isfjorden




Primer contratiempo, Sylvain apena tiene menos de medio termo de te, y Yasmina nada de agua... yo tengo medio litro y Lorenz un litro, no creo que sea suficiente...

Seguimos subiendo y vemos por primera vez el pico,a lo lejos, pero no la cara que queremos bajar, sino la Oeste, con varias opciones de canales y una bajada bastante seria... el tiempo está bastante nublado y con baja visibilidad.



Seguimos andando, la verdad es que esta zona es espectacular, con varios picos muy cerca con muchas opciones, sin mucha dificultad puedes tener una bajada considerable.
Llegamos ya a la cresta, dónde las vistas son mejores si cabe que anteriormente, y el tiempo empeora cada vez más....

Yasmina con el fiordo a la espalda... montañas, nieve, fiordos, mal tiempo... esto es la auténtica Noruega!




Yasmina empieza a acusar el cansancio, y se queja de un dolor en un músculo de la pierna... Sylvain y Lorenz, muy experimentado en esto de montaña, van en cabeza con bastante ventaja... nunca se podrá competir con raquetas contra skiers en velocidad y comodidad de travesía! jejeje

Seguimos cresteando, el camino es fácil, pero Yasmina no hace más que quedarse atrás todo el rato, así que decido ir a su ritmo para que no se derrumbe moralmente... llevamos unos 700metros de desnivel en las piernas, y eso se empieza a notar. Aunque se nota más la falta de agua, intentamos derritir hielo pero le cuesta mucho tiempo, así que optó por ponerme la botella lo más pegada al cuerpo posible, entre camiseta y polar.
Vamos charlando de muchos temas, a nuestro ritmo. Paramos a comer algo de chocolate, miro si se ha derretido el hielo, pero nada... sólo da para mojarse un poco los labios.
Ya sé que no es bueno comer nieve, pero no queda otra, nuestras bocas están muy secas.
Yasmina empieza a no ver las cosas claras, y por mi cabeza pasa el pensamiento que el tiempo se nos está tirando encima... y el tiempo meteorológico también, la cima está tapada desde hace un buen rato.

Salvamos un pequeño desnivel y nos plantamos a unos 981m según el mapa, ahora ya encaramos realmente la pala final. Yasmina se queda irremediablemente atrás, y se pone a nevar con un viento un poco molesta. La pala se ve espectacular por eso.
Voy caminando, esperando a Yasmina cada cierto tiempo, no veo a los dos en cabeza.
Yasmina me grita que me espere hasta que llegue, me dice que no puede seguir, su pierna la está matando, y que está muerta... además, no está segura de que pueda bajar cómodamente por la pala principal. Hablamos un rato, y decido que me voy a quedar con ella. Son las 4 de tarde, el tiempo está feo, y creo que a mi ritmo me quedarían un par de horas más, cosa que sería demasiado tarde por la luz... además no quiero dejar bajar a Yasmina sola, así que intentamos llamar a Sylvain pero nada. Me pongo a caminar a ritmo rápido para intentar atraparlos, y en 15 minutos los atrapo, están descansando y comiendo algo.

Les explico la situación, y que si fuera con ellos les retrasaría mucho, así que mejor que vayan tirando. Le echo una ojeada al mapa, pero el descenso es fácil y intuitivo, así que les deseo buena suerte y empiezo a guardar las raqueta y a ponerme la tabla mientras llega Yasmina. Hemos llegado a unos 1100metros, como mucho.
El pico tendrá que esperar... pero bueno, de ahí no se va a mover, así que ningún problema, volveré!

La visibilidad es muy mala, pero la nieve es espectacular!! creo que nunca he bajado por un sitio con tanta nieve y sin ni una traza... pero la luz plana no me deja ver el relieve y me hace caerme varias veces, al haber cambios de desnivel de repente. La nieve parece bastante estable, cosa que se agradece, y deja disfrutar más.
Después de una bajada muy divertida por la pala, nos metemos en un bosque muy abierto, y la cosa se pone más difícil, ya que la nieve es más costra que otra cosa, y girar no es fácil... pero finalmente consigo salirme bien, y ir a buscar la traza de ski de fonde que nos llevará de vuelta al coche. Consigo evitar la mayor parte del plano, cosa que se agradece cuando vas con tabla...

Llega Yasmina, ha tenido varios problemas bajando, y está destrozada. Comemos algo, y vemos que ya están bajando, así que les esperamos.
Nos comentan que la bajada espectacular, pero sin visibilidad... Lorenz me dice que con sus skis no ha disfrutado tanto como yo lo he hecho, ya que él ha hecho snowboard de montaña muchos años, pero este año se pasó al ski de montaña... no se puede tener todo, si quieres ir ligero subiendo, no puedes bajar muy cómodo... hay que buscar el equilibrio perfecto!

Seguimos la rápida pista de ski de fondo, que a veces parece más una pista roja de estación de ski que otra cosa, por el fondo del valle, con estas vistas...



Llegamos al coche, contentos con el día, ya casi de noche. Cargamos trastos, paramos en un super a comprar algo para beber, y a buscar un sitio para dormir.
Después de dar algunas vueltas, nos adentramos en Trollstigen, una carretera cerrada en invierno que en verano promete vistas espectaculares.

Buscamos el sitio idóneo, y plantamos la tienda, después de cavar un poquito.
Ahí dormiremos tres, y Sylvain empieza a construir un iglú donde pretende pasar la noche...



Cocinamos pasta con pesto, y estamos un rato de charla, hasta que a las 22:30h nos vamos a dormir. Preparamos esterillas, y ropa de abrigo por si acaso.
Sylvain se mete en su iglu, y todos a dormir.




La noche va bastante bien, el único problema es que mi esterilla es muy estrecha, así que cada vez que me salgo un poco y toco el suelo me congelo vivo... por todo lo demás, duermo solo con polar y ropa interior.
A las 4am Sylvain viene muerto de frio y empapado a pedirme las llaves del coche, se va a dormir ahí... parece que el invento no le ha funcionado!

El despertador suena a las 7am, pero nadie se levanta, salir del saco no es fácil... finalmente lo conseguimos a las 10am, el cansancio y la fría noche se hace notar.


Nos damos cuenta de la grandeza del sitio dónde hemos dormido en cuanto salimos de la tienda. El sol aparece en algunos instantes, pero sigue bastante nublado.



Desayunamos, hablamos durante mucho rato, y decidimos ponernos en marcha. La temperatura ha subido, estamos en positivo, y no hacemos más que escuchar pequeños aludes en el valle... eso no nos gusta nada.
Decidimos que quizás es mejor irse un poco más al interior, buscando la lejanía del oceáno, tanto por estabilidad de tiempo como por buscar temperaturas más fría y mejor calidad de nieve.

Dejamos Åndalsnes atrás, prometiendo que volveremos seguro, y rápidamente tenemos que parar, tenemos justo delante nuestro Trollveggen, la pared del Troll, un sitio muy conocido por escaladores alrededor del mundo, por tener el desnivel vertical más largo de Europa.
Me doy cuenta que le había hecho una foto cuando ibamos para allí el sábado por la mañana con sol, y que también le había hecho una desde la cresta el día anterior... está claro que la pared llama la atención aunque no sepas que es famosa!

Trollveggen con sol desde el coche



El sitio es espectacular, el pico Romdalshorn también llama mucho la atención.
Todo el valle, con paredes escarpadas, acabando en un fiordo, nos deja a todos boquiabierto.
Perdemos tiempo haciendo muchas fotos, pero no nos importa.

Finalmente ponemos rumbo hacia algún sitio más interior, y yo vuelvo a caer dormido.
Me despierto a la altura de Dovrefjell, un parque nacional, y las montañas son espectaculares también aquí, muchas más suaves y con más bosque. Hay tantos sitios a los que ir en este pais!

Después de mirar el mapa, y considerando la hora que es, decidimos hacer un pico cerquita de la carretera, de poco desnivel, de unos 1500, pero la carretera ya está a 1000m. Sylvain y Yasmina lo agradecen porque los dos tienen mucho dolor en un músculo de la pierna... el dolor del telemarker?

Paramos cerca de Hjerkinn, a unos 40km de Oppdal, comemos algo, y aunque hace un poco de sol, el viento es gélido.
Empezamos a caminar, la nieve está bastante venteado, pero mejor eso que volverse a casa sin hacer nada no?
Además las vistas compensan, con la famosa Snøhetta relativamente cerca, cubierta por las nubes.



Nos plantamos en la cima en una hora y media, quizás un poco menos, y observamos el paisaje... con el parque nacional de Dovre en todo su esplendor.
Examinamos las posibilidades ir a Snøhetta desde aquí, parece factible, quizás en dos días por eso.

Empezamo el descenso... la verdad, una pesadilla, la primera pala totalmente venteado y durísima, después plano que me obliga a quitarme la tabla, y luego disfrutamos de alguna acumulación de polvo intercalada con nieve dura, hasta que me equivoco y me meto demasiado a la derecha en un bosque... cosa que me hace tener que quitarme la tabla y tener que caminar con nieve por encima de la rodilla durante 15minutos... porque esa nieve no podía estar en la bajada? culpa del viento...

Ponemos fin al viaje llegando al coche, organizándolo todo en el maletero, y poniendo rumbo a Trondheim... dónde llegaríamos dos horas y media después en medio de la lluvia... parece que la primavera se quiere asomar por aquí!

más fotos aquí

Storhornet 1589m 11-dec-2009

Esta actualización es un poco vieja, pero la tenía pendiente, así que ahí va, más vale tarde que nunca!

El 11 de diciembre, aprovechando tiempo libre entre examenes y que era el último dia disponible que podíamos ir con Jirka, decidimos ir a hacer un poco de snowboard de montaña. El plan inicial era irnos bastante más lejos, pero finalmente, y a última hora, encontré una montaña que tenía buena pinta, y las condiciones de nieve eran parecidas a dónde teníamos que ir, pero estaba más cerca.
La elegida, después de revisar la zona al detalle, y teniendo en cuenta que queríamos evitar el máximo de plano posible y buscar un descenso más directo para no tener que cargar la tabla durante mucho tiempo de aproximación fue Storhornet, un pico de 1589m en la cadena montañosa de Trollheimen, cerca de la estación de ski Oppdal.


Ver mapa más grande

Debido al cambio de planes a última hora, lo único que pudimos hacer fue hacer una foto a un mapa de internet, ya que aunque la ruta era bastante intuitiva y el pico era fácil de llegar, nunca está de más llevar un mapa. Y cómo no tenía manera de conseguir uno a las 19h de la noche del día anterior... jejeje

Así que quedamos bien temprano para ir para allí, y después de varias vueltas por la urbanización de casas, llegamos al punto de inicio. El panorama no era muy alentador, el grosor de nieve era muy fino, 3-4 cm, así que nos tomó un tiempo decidir si finalmente llevaríamos la tabla... pero ya que habíamos ido hasta allí, la cargamos, quién sabe como estaría ahí arriba.

Empezamos a caminar, primero en una carretera nevada, donde Olivier ya demostró que con sus skis de telemark avanzaba mucho más rápido, para después meterse dentro de un bosque poco espeso... ibamos sin raquetas pero se avanzaba bastante bien. Jirka finalmente subió con botas de montaña, así que subía más cómodo que yo.

Vistas del valle glaciar que dejábamos atrás, con Oppdal al fondo



Seguimos subiendo y la nieve era abundante, excepto en las zonas dónde pegaba el viento, que estaban totalmente peladas.
El camino és fácil, sin gran pendientes, y se podía progresar muy bien con raquetas.
Y entonces, salió el sol, y tuvimos algunas vistas espectaculares

Jirka con la parte más vertical, y sin posibilidades de descender, al sur del plateau somital




Así que empezamos a encarar la parte de más pendiente, todavía con sol. Aquí unos pequeños crampones, o simplemente las raquetas con sus agarres metálicos, nos hubiesen venido muy bien... algunas veces no lo tenías muy claro y había que pisar con fuerza y agarrar fuerte los bastones.

Olivier progresando para arriba con el sol de diciembre ya tapándose a sus espaldas



La zona de más pendiente se pasó rápida y sin ninguna dificultad, incluso localizamos un salto para hacer a la bajada... ahora estamos en el plateau somital, pero se ha tapado de tal manera que no vemos a 5 metros... esto es Noruega, estando tan cerca del mar el tiempo pasa de totalmente despejado a no ver nada en cuestión de segundos!
Así que empezamos a caminar siguiendo la dirección de la brújula de dónde supuestamente tiene que estar el pico... el frío es considerable: gorro, barba, pelos, guantes y partes de chaqueta están totalmente helados.
Seguimos caminando, y seguimos sin ver nada... que raro, tenemos la sensación de estar caminando mucho y que no hay cima...
Seguimos hasta que vemos que a nuestra derecha empieza a hacer pendiente hacía abajo, así que seguimos ese borde... empezamos a estar un poco desesperados, no encontrar la cima sería absurdo, y más sabiendo que tiene un pequeño refugio, pero no vemos nada de nada, estamos caminando a ciegas.

Y de repente, tal como se tapó todo antes, se destapa por un segundo y vemos la cima con el refugio a lo lejos! Intentamos memorizar la dirección ya que se vuelve a tapar al instante, pero ahora es todo más fácil, y además tenemos la motivación de que ya estamos arriba casi.

Y en 10minutos, a las 13:31h, nos plantamos en la cima, Storhornet 1589m, mi primer pico con tabla en Noruega!



Entramos en el refugio, que hacía casi más frío que fuera ya que estaba lleno de nieve, comer algo, beber, y rápido para abajo que nos quedamos helados.

La primera parte de la bajada era bastante plano, incluso tuvimos que remar un poco, pero más que nada porque la niebla no te dejaba ir tan rápido como nos gustaría... para después llegar a la parte de más pendiente dónde la nieve estaba un pelo dura pero se dejaba hacer muy bien.

Saltamos en el salto que habíamos clichado en la subida, y nos metemos en la zona de menos pendiente, siguiendo siempre el río de cerca, donde había más acumulación de nieve por el viento, y usándolo como pipe natural a veces.
Seguimos el río hasta que pasamos una zona venteado, donde tenemos que quitarnos la tabla para caminar unos metros, pero rápidamente nos la ponemos para el último tramo de bosque, con buena nieve y algunos arbolitos para ir saltando, y ya con las últimas luces del día... en diciembre en Noruega hay poquísimas horas de sol!

Así que finalmente encontramos por dónde habíamos subido, y el día acabó con una carrera de snowboard-trineo contra Jirka en la carretera nevada.

La verdad es que no esperábamos tanta nieve, así que mereció mucho la pena subir!
y siempre sienta bien salir a caminar a la montaña.
aunque un poquito de buen tiempo se hubiese agradecido... pero ya se sabe, esto es Noruega!

las fotos en http://picasaweb.google.com/victor.perise/Storhornet#

Januar = Vassfjellet, Åre, Norsk kurs

Esta actualización va a ser más general que no las anteriores, debido a que he hecho varias cosas pero tampoco muy importantes desde mi punto de vista.

Hasta esta misma noche, llevábamos exactamente desde el día 4 de enero sin nevadas, eso hacen 20 días de sol generalmente, aunque tuvimos 4 días seguidos de niebla en la ciudad debido al aire frío acumulado, aunque si subías un poco en altura la vista del mar de nubes era espectacular.

Las preivisiones son bastante buenas para esta semana, http://www.yr.no/sted/Norge/S%C3%B8r-Tr%C3%B8ndelag/Trondheim/Lian/langtidsvarsel.html
a ver cómo quedan las montañas después de este episodio de nevadas! que ya tocaba que nevase...

Estoy subiendo bastante a menudo a la estación de ski de Vassfjellet, de la cual tengo el pase de temporada, y está a unos 35minutos del centro en autobús, así que es perfecto para esos días aburridos y que no sabes qué hacer. Finalmente nos hemos juntado unos cuantos con el pase de temporada, así que siempre encuentras a gente con quien subir. Creo que nunca me había sentido tan cómodo encima de la tabla a estas alturas de temporada.

La estación en si es pequeñita, un telearrastre en forma de T, muy rápido, te sube unos 300metros de desnivel, y de ahí tienes una bajada larga, aunque si quieres algo más corto tienes otro telearrastre abajo perfecto para rondas rápidas de park, otro que aún no he visto abierto en la zona alta,y otro en zona de debutantes, muy lento dando acceso a una pista ancha y suave, perfecta para aprender.
Tienes una zona a la izquierda con varias pistas que discurren entre árboles y donde puede haber posibilidades de meterse dentro del bosque ya que no es muy espeso... lo he probado una vez, y hacía una semana que no nevaba y aún encontré powder de muy buena calidad! es lo bueno de que haga tanto frío.

La estación se extiendo hasta la cima, dónde hay una antena de telecomunicaciones, a la que ya subí en octubre (ver aquí), con un remonte que todavía no han abierto, pero que espero que hagan pronto. Pero como me cansé de esperar, decidí subir un día caminando allí arriba a ver cómo estaba el panorama. Cogí sólo los bastones, no quería cargar con las raquetas todo el día para tan poco trozo, así que ayudado del remonte largo, que para eso tengo el pase de temporada, me planté en la cota alta de la estación, mirando por dónde podría subir.



Después de mirar un poco, ví que hay una pista que estaba un poco pisada, así que ma aproveché de ella para subir más fácilmente, a la derecha de la traza del teleski. La subida se hacía fácil aunque resoplando debido a la pendiente.
Echando la vista atrás se veía la altura que iba ganando, hasta llegar al final del trazado del teleski, ahí decidí que no iría hasta la antena porque me desviaría demasiado de por donde quería bajar, así que visualicé una cima justo enfrente, y para ahí tiré.
Ahora ya me salí del trozo pisado, y a la primera pisada, me hundí hasta más arriba de la rodilla... así que los últimos 70metros fueron muy duros, realmente sudaba la gota gorda para avanzar un paso!
Después de 31minutos, llegaba arriba, con un viento muy fuerte, pero con estas vistas







La bajada fue corta pero intensa, acabándola por la zona que tendría que ser una pista negra, pero no está preparada, con powder incluso después de muchos días sin nevar...
Y después de un poco de relax en la cafeteria y comer algo, tocó pistear y freestylear un poco... un día de snowboard completo




Del 17 al 21 estuve en la estación sueca de Åre, a la que dediqué la entrada anterior de este blog. La estación es espectacular, muy alpina, nada que ver con otras estacion escandinavas, y el dominio estaba prácticamente todo abierto. Las condiciones de nieve eran buenas en pista, con alguna placa de hielo que afloraba en las zonas de más pendiente debido a toda la gente que pasa, y en fuerapistas eran de nieve dura, así que realmente poco se pudo hacer fuera de las pistas. Además tuvimos un poco de viento en cotas altas, cosa que aún pelaba más las zonas, aunque si encontrabas una zona resguardada había bastante acumulación de nieve.
Tres días de snowboard que dieron para mucha diversión, y para conocerse ya bastante bien la estación, a la espera de las nevadas... quizás hay que volver este fin de semana?

Y para acabar, este semestre voy a hacer, entre otras asignaturas, un curso de noruego... va ser la primera vez que aprenda un idioma siendo adulto, ya que el inglés lo llevo aprendiendo desde pequeño, y el alemán lo aprendí cuando tenía 14 años... veremos qué tal va, la verdad es que estoy muy ilusionado!
Empieza oficialmente el segundo semestre.